#FalsosRecuerdos | La fragilidad de la memoria y el riesgo de condenar inocentes
Un caso penal ilustra esta fragilidad judicial: un ciudadano fue privado de su libertad y procesado por un delito que no cometió, basándose exclusivamente en un testimonio luego revelado como inconsistente. La #PericiaPsicológica presentada confundió el análisis técnico con la verdad. Es crucial entender que un protocolo de evaluación psicológica es meramente descriptivo y contextual, jamás determinante de culpabilidad; convertir un informe pericial en la piedra angular de una sentencia no es solo un error metodológico, sino una apertura directa e inaceptable a las condenas injustas.
Hay que enfatizar que la #MemoriaHumana, lejos de ser una grabadora, es un proceso activo de reconstrucción. Por lo tanto, resulta lógico indicar que los recuerdos son inherentemente vulnerables: se reeditan con el paso del tiempo, se contaminan con influencias externas y se moldean por las emociones. En este escenario, lo que se presenta como una certeza inamovible puede ser solo una narrativa personal, sesgada y fluctuante.
Para #fiscales y #jueces, esta realidad plantea un desafío capital: no basta con un informe pericial ni con un testimonio meramente subjetivo para acreditar la responsabilidad penal. La administración de justicia exige contrastar, verificar y sostener sus decisiones en pruebas objetivas e irrefutables, plenamente conscientes de que la fragilidad de la memoria puede convertirse en el terreno fértil no solo del error, sino también de las #FalsasDenuncias.
Omar CHAYÑA
Defensor en litigios penales, disciplinarios y vinculados a la ciencia policial
S1 PNP ® | CEO de Derecho de Policía
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